El mercado energético y sus complejas relaciones tienden a crear cortocircuitos que tienen un mayor impacto en el último extremo de la cadena: el consumidor, que no acepta recibir una factura revisada sin antes quejarse.
Y esto es cierto.
No es nuevo que la industria haya aprendido a tomar de la mano a este consumidor medio para incluirlo en los datos frente a todo tipo de trampas que le lanzan a la llamada Cuenta de Desarrollo Energético, CDE. Un fondo sectorial creado hace 22 años para financiar una serie de políticas públicas, en particular mediante la concesión de subvenciones a las tarifas energéticas.
Al menor indicio de negociaciones en este sector, salta la alarma. Una especie de ancla capaz de elevar el calor de los debates y cambiar el rumbo de los proyectos en el poder legislativo y de las posiciones en el ejecutivo.
Este locutor fue despedido recientemente en una de las discusiones más acaloradas de los últimos días. Negociación de centrales termoeléctricas de Eletrobras con Âmbar Energia. El grito es que el acuerdo afectará las facturas de electricidad, con la emisión de una medida temporal destinada a aumentar los costos y riesgos en las facturas de electricidad.
Ministro de Minas y Energía Alejandro Silveira Dejó el cargo el viernes 12 para garantizar que «ni un céntimo llegue al consumidor brasileño». En una entrevista con Globunoticias En el que buscó explicar su agenda con el directorio de Ampar y otras empresas, Silveira afirmó que la información publicada por la Rep. N° 1232/2014, para rescatar a la distribuidora Amazonas Energia, generaría un aumento en la factura eléctrica. , era falso. . “Es irresponsable decir que los 9 mil millones de reales discutidos entre Eletrobras y Amazonas Energia desde la concesión en 2018 pasarán al consumidor brasileño”, afirmó.
Silveira explicó que el actual mandatario está redistribuyendo costos, que actualmente se pagan exclusivamente a través de la llamada energía de lastre, que es energía que paga únicamente el consumidor residencial. Con los cambios, este costo se compartirá con el mercado libre, que incluye a los consumidores industriales. El Ministro tiene razón al decir que se trata de una cobardía muy dividida. Necesitará la misma convicción para cumplir su palabra, en un sector donde, como él mismo admite, operan e intervienen muchos intereses especiales.
«Beeraholic. Amigo de los animales en todas partes. Malvado erudito de la telaraña. Experto en zombis».
Más historias
Inicia otra ronda de negociaciones entre Comando y Venappan
¿El mercado está mal valorando el mantenimiento de Selec? Sepa qué esperar si ocurren sorpresas antes del nacimiento
La Ranger Black debutó en Argentina sin el motor V6 y con transmisión manual