La dictadura china ordena retirar las cruces del templo de la iglesia bajo el pretexto de «riesgos de seguridad»

Las autoridades chinas han pedido a una iglesia cristiana en la ciudad de Huainan, provincia de Anhui, China, que retire las cruces del templo debido a supuestos «riesgos de seguridad». Una de las cruces lleva cuarenta años en el lugar.

El comité de administración local, bajo el control del gobierno de Xi Jinping, ha pedido a la comunidad de Wangfenggang que retire dos cruces: una del tejado y otra de la entrada de la iglesia. Sin embargo, no presentaron ningún informe de evaluación de seguridad realizado por especialistas de los departamentos pertinentes.

Según funcionarios de la comunidad, la cruz instalada en la cima del templo fue construida según los planos de construcción y fue sometida a pruebas e inspecciones por parte de las autoridades competentes después de su finalización. Lo he estado usando durante cinco años desde que pasé la inspección.

La cruz de la entrada de la iglesia lleva allí más de cuarenta años sin ningún problema de seguridad. Para la comunidad, el comité concluyó arbitrariamente que “existen riesgos potenciales de seguridad con las cruces en el techo y la entrada sin ningún fundamento”.

Durante los últimos 30 años, el régimen chino ha permitido que las cruces se utilicen como símbolos en iglesias cristianas y lugares de reunión, tanto urbanos como rurales. Hasta cierto punto, ha habido una tolerancia tácita hacia los grupos religiosos no registrados, cuyo reconocimiento estatal en China es necesario para operar iglesias.

Sin embargo, desde 2014 se ha producido una represión generalizada de la tolerancia religiosa. Inicialmente, el gobierno de Xi Jinping comenzó a retirar las cruces de las iglesias de la ciudad de Yuyao, situada en la provincia de Zhejiang, una zona con una gran comunidad cristiana. Durante los tres años siguientes, se retiraron más de mil cruces de la provincia de Zhejiang.

Esta campaña de eliminación de símbolos sagrados se ha extendido a otras provincias, como Henan, Anhui y Jiangxi, afectando también a regiones como Shandong y Xinjiang, donde hay una gran presencia cristiana en el país.

Con información de Gazeta do Povo