Conoce los métodos anticonceptivos que brinda el sistema único de salud

¿Tener hijos o no? El acceso a la planificación familiar es un derecho garantizado por ley, e incluye un conjunto de procedimientos y servicios de la red pública de salud con el objetivo de ayudar a pensar cuál es el mejor momento para asumir la paternidad, si existe tal deseo, que también incluye la disponibilidad de anticonceptivos para hombres y mujeres.

Después de todo, sea cual sea la situación o los planes de vida, es importante tener cuidado para evitar el riesgo de un embarazo inesperado o no deseado. Los métodos anticonceptivos pueden ser reversibles o permanentes, diarios o de larga duración, hormonales o no, de barrera o no. Pueden o no tener contraindicaciones. Conozca las principales rutas que ofrece el Sistema Único de Salud (SUS), a las que pueden acceder hombres y mujeres, desde las Unidades Básicas de Salud (UBS).

Preservativos internos y externos: son el principal método de barrera, es decir, evitan que el esperma se encuentre con el óvulo a través de una barrera física, además de proteger contra las infecciones de transmisión sexual (ITS). Se distribuye gratuitamente en las Unidades Básicas de Salud (UBS).

La píldora -uno de los anticonceptivos más utilizados a nivel mundial- ha supuesto un avance importante en cuanto al aumento de la independencia de las mujeres. La píldora más utilizada es la píldora combinada, que se compone de estrógeno y progesterona sintéticos, similares a las hormonas que secretan las mujeres. Este tipo de píldora previene la ovulación y también actúa sobre el moco cervical, lo que dificulta la entrada de los espermatozoides. El uso de hormonas tiene contraindicaciones en algunos casos, por lo que es importante que la mujer hable con su médico sobre los pros y los contras de adoptar este método.

Anticonceptivos hormonales inyectables: consisten en una inyección que se aplica cada mes o cada tres meses, con el objetivo de evitar que el cuerpo libere óvulos y espesar el moco cervical. Al igual que la píldora anticonceptiva, se compone de uno o dos tipos de hormonas (progesterona o una combinación de progesterona y estrógeno).
Implantación hormonal – un método hormonal a largo plazo que funciona a través de una varilla insertada en la parte interna del brazo, para liberar hormonas que impiden la liberación de óvulos y la llegada de espermatozoides.

DIU – un dispositivo intrauterino. El tipo más común es el cobre, que estimula la reacción inflamatoria dentro del útero que mata a los espermatozoides. Es uno de los anticonceptivos más efectivos porque es interno y no requiere disciplina. Tampoco contiene hormonas y dura hasta diez años.

Ligadura de trompas y vasectomía – métodos irreversibles, métodos quirúrgicos para evitar la anticoncepción, cortando los conductos que serían los caminos por los que podrían pasar tanto los espermatozoides como los óvulos. En el caso de las mujeres, se cortan las trompas y se amarran sus extremos. En una vasectomía, se cierran los conductos deferentes del hombre, que transportan el esperma desde el testículo a otras glándulas que producen esperma. Ambos son seguros y efectivos, pero por ser definitivos tienen normas que deben ser implementadas, como sesiones de planificación familiar y consultas con un grupo multidisciplinario de profesionales.

Acudir a una consulta médica, ya sea con un médico general o un ginecólogo, es el primer paso para encontrar el mejor método anticonceptivo, según la edad, las condiciones de salud y otros aspectos a evaluar.